sábado, 20 de junio de 2015

Un golpe de la realidad

Tuve una especie de relación con un cliente, casi de pareja.

Aunque la verdad, bueno partiendo desde el principio trataré solo de contar que pasó con él.

Creo que él fue uno de los primeros clientes que tuve, o al menos de los primeros meses, de cuando me lancé. En ese tiempo yo trabajaba solo a domicilios, siempre eso me ha parecido más cómodo, y menos asfixiante que estar encerrada esperando todo el día. Recuerdo muy bien que en ese tiempo tenía uno de esos teléfonos blancos sin marca, que sonaba horrible, era como una chicharra y él me llamó muy temprano. Primero como que me molestó la hora, pero luego lo escuché. Tenía una voz cálida y juvenil, sonaba seguro de si mismo, me mató esa especie de risita carraspeada, podía imaginármelo mirando al suelo mientras me hablaba, sonriendo emocionado porque tenía el teléfono encendido, porque se iba a ver conmigo quizás y tenía algunas expectativas sobre mí. Bromeamos un poco,  y quedamos para el medio día, él pasaría a buscarme cerca de mi casa (no en realidad siempre les daba unas calles de distancia como referencia).

Cuando llegó a buscarme realmente fue desilucionante, jajajaja, na, el cabro era guapisimo al punto que me daba planchita!!! pero era la única pobre loca parada en esa esquina y ya le había dicho con qué ropa andaba así que salir corriendo como una loca por la calle no era una opción, igual lo pensé,  pero él andaba en auto y yo no corro rápido así que me iba a alcanzar igual.  Apechugué nomás.

Me llevó a un motel muy lejos! por el campo! a la rechuchaaaa!! ya tenía miedo porque igual hubo un tipo que me llevó una vez por el aeropuerto, me manoseó y me dejó tirada ahí, asi que... bueno él no lo hizo. El lugar era helado y tenía una silla del amor jajajaj. No la usamos.

Para ser sincera, onda cruda, duró poco... generalmente duraba diez minutos o quince como máximo cuando nos juntábamos. Pero no me importaba porque este otro besaba, él rey del calentamiento!!! o sea, era desesperantemente bueno en el oral.... estoy algo obsesionada con la boca no?... pero besaba rico, suave, mojado, caliente, mmmmm....

Una vez lo hicimos en el camino al motel, onda no nos aguantamos! jajaja,  igual me dio miedito, porque paró la camioneta y se bajó, abrió la puerta de mi lado, me abrió las piernas y metió toda si cara en medio.... yo andaba con mini.... igual era incómodo porque quedé con la palanca de cambio en la espalda.... pero acabé rico, me dio vuelta y chum pa dentro! igual pasó un auto, pero nunca sabré si me vieron a poto parado :O

Con él era todo una aventura, a veces me llamaba para que saliera al negocio que estaba cerca de mi casa, solo para verme...  y manosearme un poco.

Hubo un momento en el que lo prefería por sobre el trabajo, pasabamos horas juntos. Hablábamos a todas horas como unos pololis.

Hasta me indicó que me descargara una app para que hablaramos mas, en ese momento todo cambió.

Porque el siempre me hablaba de su ex, de lo maravilloso pololo que fue, y la madura ruptura.

Mi principe naranjo me había mentido todo el tiempo, no entiendo cómo los hombres pueden mentir tanto (yaaaaa), fue como, el medio sacón de onda.  No se llamaba como me decía, su ex era en realidad una hermosa chica con la que tenía una relación eterna, no trabajaba en lo que decía, no era nada de lo que yo creía.  Bueno esta app, te guardaba el nombre real de la cuenta donde accediste por primera vez, lo mas probable es que el con el mismo número tuvo una cuenta, y luego se creó otra... este tipo me tenía a tal nivel engañada, que tenía un facebook que parecía real, con amigos, fotos con sus amigos, personas con su mismo apellido todo, todo!  y cuando ví su nombre real, apareció todo, su nombre, su relación.... me dolió la verdad, mas que la mentira la desconfianza, porque yo tampoco era material de pololeo, pero le confié muchas cosas, cuando supe que no era realmente quien decía ser todo cambió. Aunque me pidió perdón y reconoció su estupidez, nada pudo ser igual.... lo dejé de a poco, no sabía con quién hablaba. Y SI LEES, MALDITO! NO TE ODIO, PERO PUCHA QUE ES PENCA ESTAR DEL OTRO LADO. NUNCA LE VOY A CONTAR A NADIE QUE CUANDO ACABABAS PEDÍAS PERDÓN.

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