Mas aun cuando llega un cliente que exige mas allá de lo acostumbrado.
Cuando llega este Gastonsito Pto Varino, flaco, moreno, bien dotado y exigente las cosas son un poco menos relajadas que con los demás... él es un hombre del mundo putero, no solo eso, creo también que participa en swingers, que feo eso. En fin, no es de los fáciles de matar.
Nos hemos visto varias veces, la primera vez que estuvimos juntos no recuerdo que haya durado mucho, lo que si recuerdo es que aunque es muy flaquito su pene es grande, nada que ver con lo que me esperaba, apenas cabe en mi boca y la verdad nunca me lo voy a poder tragar completo. Aunque lo intenté. Tuve que esmerarme en el oral, tratar de acomodarme con tal de que quedara lo suficientemente sensible, porque ya veia que mi pobre chofita sufriría con semejante animal ingresando. No solo eso, estaba duro como una roca, las colegas entenderán que a veces hay penes duros, pero hay unos que quedan erectos a tal punto que es la chofita y todo tu cuerpo el que debe acomodarse a él. La verdad para no hacerle eco a su ego traté de no gemir mucho, aunque era algo incontrolable al sentir sus movimientos vigorosos, me puso en 4 yo me sujeté fuerte de la almohada y acabé rico, tenía ganas de apretar mis piernas pero simplemente el tamaño no lo permitía. Él dijo algo que no recuerdo, a lo que respondí si quieres te finjo, y comencé a fingir gemidos españolisimos muy porno, nos reimos hasta que acabó en mi boca.
Insistentemente trataba de jugar con mi Anito, y bueno a Anito no le gusta que lo manoseen, a pesar de que le expliqué mi situación, y aunque estuviera dispuesta con semejante tamaño no podría. Aunque me subía y me acomodaba tratando de alejar esa mano de pulpo y ese dedo que lo perseguía Gastonsito no lo dejaba tranquilo. Pobre Anito fue acosado.
La segunda vez que nos vimos él se atendía con una colega y salió de la habitación de ella justo cuando yo iba llegando. Culposamente se excuso por su terrible engaño, diciendo que yo no le había contestado y por eso se atendió con mi amiga. Que hombre mas infiel.
Nos vimos despues de un tiempo, esta vez dejó tranquilo a Anito. Gracias por eso. Nuevamente este oral casi profundo que me hace llorar, la mandíbula algo cansada pero aún asi prefiero hacerlo a que me dé asi comom él lo hace. Es tan impetuoso el niño! Recuerdo que me subí un ratito, con las piernas bien abiertas para ir bajando suavemente mientras mi Chofita se acomodaba a su pene, sentía cada milímetro de él, era algo costoso bajar, pero logré llegar al tope y me movía despacito recurriendo a recuerdos lindos y exitantes para mojarme, tratando de distraerme de este gran coso que me dilataba. Cuando ya pude moverme con libertad tuve un momento de descanso con su boca amable y caliente, estaba lista para acabar, pero no pude, nuevamente me puso en 4, comenzó a darme con fuerza, yo sentía cada vez mas calor, entonces resolví poner mi cabeza en la cama y levantar la cola para poder tocarme y acabar en la libertad que te da esa pose. Mientras Gastón tiraba mis caderas hacia su pene, agarraba con fuerza mis pompas yo me mojaba cada vez más hasta que pude liberar todo mi placer y comencé a acompañar sus movimientos con mis caderas de arriba hacia abajo, rápido y constante, escuché que me decía que quería acabar en mi boca, pero yo no quería dejar de moverme así que antes de que pudiera salir quedé casi sentada sobre sus piernas y terminó llenando el condón agarrado de mis caderas.
La última vez que nos vimos, lo que cuenta como mi despedida, llegó como apuradito porque venía a hacer unas compras de la pega jeje. Bueno así que pasó por un cortito, no es tan cortito con él. Nos besamos rico y me fui en honor al tiempo directo a su amigo. Luego él también besó a la chofita asi rico, y comenzamos a darle, pero volvió con su obsesión con Anito a lo que yo trataba de esquivar ese dedo metiche creo que tocó un poco mas que lo que me hubiese gustado. Se puso detrás mio y nose si fue porque me iba a extrañar o quería dejarme inválida pero esta vez me dió aún mas duro, sacaba su pene casi completo y lo volvía a meter con fuerza, mi pbre Anito temía por su seguridad pero yo aguanté, aunque si estuvo cerca e incluso me dolió un poquito cuando de una estocada con fuerza pasó rosandolo. Bueno no se calmó, mis pompas golpeaban su pene con ira. Luego se sacó el condón, y acercó su pene a mi cara, yo estaba algo muy agitada. Acabó en mi boca, mi pera, mi cara, mi pecho. Creo que esa imagen de mi cara toda embetunada fue una linda despedida.
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